Este es simplemente un momento de juego en mi jardín interno. Me gusta jugar, me gusta pensar como está escrito en mi libro “Juan Carlos Pallarols, su vida y su universo” que estoy imitando la obra de Dios, que es lo único que uno no puede superar en nuestro potencial de creación. Somos hechos a su imagen y semejanza, pero jamás seremos Él, por eso tal vez el mayor de los errores en los que un hombre puede caer, es en el de creer que su verdad es la única, porque estaría tomando un lugar omnipotente y omnipresente que sólo le corresponde a nuestro creador.
Todo ha sido creado y la búsqueda de la perfección es uno de mis mayores gustos. Porque lo perfecto es bello y amo la belleza.
Cuanto más perfectos nos proponemos ser en cualquier tarea, aún en la preparación de una colación, estamos brindándonos a nosotros o a nuestros seres queridos un acto de amor y dedicación, una donación de excelencia, de lo mejor de nosotros mismos.
Juan Carlos Pallarols.